Los lubricantes para vehículos eléctricos Petronas Iona se actualizan

Petronas, especialista en la fabricación y comercialización de fluidos, ha presentado esta semana la nueva generación de lubricantes para coches eléctricos Petronas Iona. A través de un evento virtual desde su Centro Global de Investigación y Tecnología de Turín (Italia), la compañía ha presentado los nuevos lubricantes como el resultado de un viaje continuo hacia las últimas tecnologías y tendencias en la movilidad eléctrica.

Según el informe Global EV Outlook 2021, el mercado automovilístico mundial se vio muy afectado por los efectos de la pandemia. Sin embargo, mientras que las matriculaciones de vehículos convencionales y de vehículos nuevos en general cayeron, las ventas mundiales de coches eléctricos experimentaron un aumento del 70% en 2020.

«Creemos que la electromovilidad se está expandiendo a un ritmo muy rápido. Por ello, soluciones innovadoras como Iona son clave para acelerar el cambio a la movilidad eléctrica, y garantizar así un futuro más sostenible», ha comentado Giuseppe D’Arrigo, director general y consejero delegado del Grupo Petronas Lubricants International.

Lanzada por primera vez en 2019, Petronas Iona tiene como objetivo ayudar a acelerar el cambio hacia un modelo de cero emisiones de gases de efecto invernadero, optimizando la eficiencia energética, la seguridad y el rendimiento de los vehículos eléctricos con soluciones avanzadas de lubricantes para este tipo de vehículos.

Desde entonces, Petronas ha trabajado para responder a los continuos cambios en la tecnología de coches eléctricos. Por ello, esta segunda generación está diseñada para satisfacer los múltiples requisitos de los sistemas de propulsión eléctrica y los ejes, incluyendo el control de la fricción y el desgaste, así como la gestión térmica para maximizar el rendimiento, la eficiencia energética y la fiabilidad de los vehículos eléctricos de alto rendimiento.

Este nuevo lanzamiento, además, está en línea con el compromiso de Petronas con la sostenibilidad que anunció en 2018, por el cual el 75% de sus inversiones en investigación y tecnología se dirigen a la reducción de emisiones para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas de carbono para 2050.