Según previsiones de la consultora Gipa recogidas por Euromaster, la actividad del taller espera alcanzar un crecimiento del 11% en 2021. Este dato supone un balón de oxígeno para los negocios españoles de reparación y mantenimiento de automóviles, que recuperarían prácticamente la mitad de la caída que sufrieron en 2020.
Este año también vendrá acompañado de una recuperación del uso del coche, que se desplomó un 20,9% durante el año pasado debido a la pandemia. El avance será de un 15,4%, aunque tardará, al menos, cuatro años en recuperar los niveles pre COVID y provocará que muchos conductores opten por llevar su vehículo al taller pues a mayor uso, mayor desgaste.
El sector de los talleres mira con especial interés el fin del estado de alarma, previsto para el 9 de mayo y que acabará con las restricciones de movilidad. Su atención también está puesta en la evolución del proceso de vacunación y si se alcanzará el objetivo de la UE de que el 70% de la población adulta esté vacunada antes del verano. Si esto es así, será un impulso para su actividad ya que permitirá un notable repunte del número de viajes y, en consecuencia, de las visitas al taller. También del turismo que es consumidor asiduo de taller, especialmente en los meses de verano.
Solo en el mes de julio, los negocios de posventa registran, históricamente, el 11% de la facturación del año, porcentaje que supone tres puntos porcentuales más que en meses como los de marzo y abril. Es en la temporada de verano cuando los conductores realizan los desplazamientos más largos y están más horas en la carretera, lo que pone a prueba la mecánica de los vehículos. De ahí que muchos opten por acudir a los talleres para su puesta a punto y mayor seguridad.
Si bien la mayor movilidad jugará a favor de los talleres este año, el sector deberá lidiar con un parque más envejecido cuya edad media alcanza los 11,6 años, según Gipa, a sabiendas de que cuanto más viejo es un coche menos pasa por el taller pues ni está en garantía ni tiene una póliza a todo riesgo. Para este año, se estima que el número de coches en garantía o con extensión de garantía caiga un 9%.
El pasado curso se realizaron alrededor de 851.000 matriculaciones (-32% respecto a 2019) mientras que las bajas fueron en torno a 612.000, cuando la diferencia entre ambas un año antes era de más de 500.000 vehículos. De hecho, la edad media de achatarramiento (o lo que es lo mismo, la vida media de un vehículo en circulación) está a las puertas de alcanzar los 20 años.
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