Groupe PSA y Punch Powertrain extienden su alianza en electrificación

Groupe PSA ha firmado un acuerdo para la creación de una segunda joint-venture junto a Punch Powertrain. La alianza estratégica de ambas compañías en el campo de la electrificación ha dado como resultado en esta ocasión una nueva empresa conjunta que diseñará, producirá y suministrará la revolucionaria transmisión de doble embrague DT2 de Punch Powertrain para la próxima generación de vehículos microhíbridos (MHEV) e híbridos enchufables (PHEV).

Groupe PSA y Punch Powertrain joint-venture híbridos

Punch Powertrain contará con el control mayoritario (61%) en la nueva empresa y abastecerá inicialmente a Groupe PSA para sus operaciones a escala mundial, aunque su objetivo a largo plazo será proveer de este componente a otros fabricantes de automóviles en los cinco continentes. El acuerdo de creación de esta empresa conjunta está sometido a aprobación a través de los procedimientos reglamentarios habituales.

Punch Powertrain aportará todas las actividades ligadas a su línea de producto DT2, incluidas las funciones de ingeniería, fabricación y soporte al mejor nivel mundial a la nueva entidad, que debería estar operativa de aquí al tercer trimestre de 2020. Punch Powertrain también transferirá a la nueva entidad jurídica sus actuales instalaciones ligadas a la tecnología DT2, situadas en Sint-Truiden, en Bélgica, y Eindhoven, en los Países Bajos. Por su parte Groupe PSA invertirá capital en esta empresa conjunta.

La nueva joint-venture «Punch Powertrain PSA e-transmissions», suministrará las transmisiones automáticas innovadoras, ultraeficientes y compactas de Punch Powertrain. Conocida bajo la denominación DT2, esta transmisión de doble embrague eficiente en costes es la primera del mercado en integrar un motor eléctrico en un vehículo microhíbrido.

Esta nueva empresa conjunta ofrecerá una de las primeras soluciones 48V de la industria para equipar vehículos microhíbridos (MHEV), lo que se traducirá en un importante ahorro de combustible y en una reducción de las emisiones de CO2, respecto a los vehículos con motor térmico. Asimismo, se ha diseñado una variante de alta tensión para vehículos híbridos enchufables (PHEV) que permite una conducción totalmente eléctrica.