Según el estudio de #Soymecánico de PRO Service, el 8,7% de los mecánicos considera su trabajo aburrido, porque siempre tiene que realizar las mismas tareas; el 2,90% dice que es el peor trabajo imaginable; el 25,6% opina que es el mejor trabajo del mundo, esto es uno de cada cuatro; y el 62,7% piensa que es una faena que «tiene su gracia». Curiosa respuesta, por cierto.
En el siguiente vídeo, Javi Sancho nos lo explica con humor:
Este resultado guarda relación con otro de los ensayos que han realizado en esta plataforma y que publicamos anteriormente en MotorOK, cuya respuesta fue que el 43% de nuestros mecánicos lo son por pura vocación. Es decir, que un poco menos de la mitad de los encuestados se reafirman en su condición de «haber nacido» mecánicos.
Podemos ver que la mayoría de los mecánicos son felices con su trabajo y esto, tanto para el colectivo profesional como para el cliente final y el sector en general, resulta genial.
Y qué mejor que nos arreglen el coche con alegría
Cuanto más felices sean los mecánicos, más rendirán y más eficientes serán a la hora de solucionar los problemas que tengan los vehículos ya que cuando uno está feliz, más a gusto trabaja y mejor resuelve los desafíos a los que se tiene que enfrentar.
Pasamos la mayor parte de nuestra vida trabajando, al menos 8 horas diarias. Ya sea en la oficina, en el taller o en la fábrica, nuestro lugar de trabajo es nuestra segunda casa. Por eso es muy importante decantarse por algo que realmente nos llene de verdad.
Es una decisión muy importante a la que muchas veces cuesta encontrar la respuesta. Algunas personas ya saben desde que son pequeñas cuál es el camino que quieren seguir, mientras que otras lo descubren con los años, a base de probar y experimentar. Saber lo que uno quiere y desarrollar lo que nos apasiona está demostrado que produce la felicidad plena. Y es una suerte poder llegar a encontrar y realizar lo que amamos.
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