El filtro antipartículas, conocido también como FAP, es un elemento indispensable para la salud de nuestro coche, pero también para la nuestra ya que de él depende la calidad del gas emitido por el automóvil. El FAP es un monolito en carburo de silicio impregnado con platino y paladio en que los canales están alternativamente abiertos y cerrados, el gas que entra en el filtro es forzado por su particular geometría a pasar por las paredes sumamente porosas donde deja las partículas contaminantes, saliendo limpio.
Es por ello que de la eficiencia del FAP depende la calidad del aire que respiramos. El filtro antipartículas retiene hasta el 99,7% de la carbonilla que emite el motor Diesel. Con tan sólo ese 0,3% que llega al exterior, no provoca efectos sobre el medio ambiente. Por el contrario, un porcentaje superior repercute de forma directa a la calidaddel aire.
El FAP no es un elemento que dure de forma infinita. Es por ello que para certificar su correcto y eficiente funcionamiento es necesario reemplazarlo cada 100.000 km. Teniendo en cuenta que un vehículo tiene unos 200.000 km de vida media, con tan sólo un reemplazamiento basta.
Para ello, Brain ofrece una gama 
de filtros completamente nuevos y catalizadores de acero refractario que son cien veces más resistentes que el de cerámica y diez veces más duraderos que el de acero convencional. Además, contamos con un eficiente almacén con gestión computarizada que tiene la posibilidad de entregar en 24 horas todos los productos de nuestro catálogo.
Hemos observado una tendencia en los últimos años en que algunos apuestan, como medida para ahorrar, por perforar o vaciar el filtro e, incluso, eliminarlo. Perforar el FAP para solucionar el atasco no sirve de nada, los agujeros son demasiado pequeños para evacuar todo el gas producido y esto pone seriamente en peligro el motor de nuestro automóvil.
Desde Brain proponemos la regeneración de los filtros antipartículas de más de 10 años como el único sistema para ahorrar sin perjudicar la calidad de este elemento indispensable para el buen funcionamiento de nuestro vehículo y nuestra salud. En ese sentido, también aconsejamos reemplazar (o regenerar) el catalizador más allá de los 100.000 km ya que su eficiencia se reduce al 40% a partir de ese momento y por consiguiente las regeneraciones del filtro no funcionarán.
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