Sernauto alerta del peligro de las bajas temporales de vehículos con fines ilícitos

Según la DGT, estarían siendo exportados al extranjero o bien vendidos por piezas de manera irregular a través de determinados desguaces.


Ante el incremento significativo de las bajas temporales de vehículos, la Comisión de Recambios de Sernauto quiere alertar del peligro que supone para la seguridad vial y el medio ambiente la práctica fraudulenta con respecto a los apodados «coches zombies». A continuación, explicamos en qué consiste esta práctica y las consecuencias negativas que conlleva.

Sernauto alerta sobre bajas temporales de vehículos

Desde la asociación de proveedores del automóvil explican que la baja temporal se esta utilizando de manera incorrecta en muchos casos, saltándose los tramites obligatorios (tanto administrativos como de descontaminación) del propio vehículo al final de su vida útil que implica la baja definitiva. La DGT sospecha que estos vehículos se estarían haciendo desaparecer, siendo directamente exportados al extranjero o bien siendo vendidos por piezas a través de determinados desguaces que acogen estos vehículos de manera irregular.

Según datos del Ministerio del Interior, cada año se dan de baja hasta 700.000 vehículos, el 50% de los cuales son temporales. Este porcentaje ha creado una alarma debido a su crecimiento exponencial, puesto que en 2004 representaba únicamente el 5% del total.

Solo en Zaragoza, las bajas temporales de vehículos se han disparado un 47% en la última década. Y es que, si en 2010 se retiraron provisionalmente 7.589 vehículos para evitar costes como la ITV, el seguro o el impuesto de circulación de manera temporal obligando a tener vehículo parado, la cifra se elevó el año pasado esa hasta los 11.159 vehículos.

Desde Sernauto quieren manifestar su postura inequívoca a favor de la reutilización de piezas, «pero siempre y cuando esta se realice de una forma responsable». Como explica Benito Tesier, presidente de la Comisión de Recambios de la entidad, «nos preocupa enormemente la falta de regulación específica sobre la comercialización de piezas usadas de segunda vida y sobre el régimen aplicable en términos de garantía y responsabilidad a los distintos operadores económicos frente al consumidor».

«Hay que potenciar el reciclaje y la reutilización de las piezas, siempre y cuando se realice a través de un proceso industrial que garantice la calidad y seguridad de los productos», destaca Tesier. En este sentido, Sernauto recuerda la necesidad de apoyar las actividades de refabricación de componentes para ser utilizados como repuestos en el mercado de recambios y fomentar aún más el reciclado de materias primas para la fabricación de nuevos componentes. ¿Las razones? Su beneficio medioambiental e impulso de una movilidad más sostenible, pero también como garantes de la funcionalidad, calidad y seguridad de las piezas.

 

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