Reacción positiva de los fabricantes de automóviles de la UE al Brexit

La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) ha acogido «con satisfacción» el acuerdo alcanzado el pasado 24 de diciembre entre la Unión Europea y el Reino Unido sobre sus futuras relaciones comerciales. «Este acuerdo es un gran alivio para los fabricantes de automóviles europeos, permitiendo al sector evitar el efecto catastrófico de un Brexit sin acuerdo», ha aseverado la asociación.

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«No hay ninguna otra industria más estrechamente integrada que la industria automovilística europea, con complejas cadenas de suministro que se extienden por toda la región», ha explicado el director general de ACEA, Eric-Mark Huitema. Sin embargo, la entidad señala que no puede hacer una evaluación completa de las implicaciones del acuerdo alcanzado hasta que todos los detalles técnicos se hayan hecho públicos. Sólo en esa etapa quedará claro si el acuerdo refleja plenamente los intereses de los fabricantes de automóviles de la UE y sus cadenas de suministro.

«El impacto de un Brexit sin acuerdo en la industria automovilística de la UE habría sido simplemente devastador, por lo que estamos ante todo muy aliviados de que se haya llegado a un acuerdo antes de que el período de transición haya expirado», ha asegurado Huitema, quien ha matizado que «aún quedan por delante importantes desafíos, ya que el comercio de bienes se verá muy afectado por las barreras al comercio en forma de nuevos procedimientos aduaneros que se introducirán en enero».

De hecho, con aproximadamente 30.000 piezas utilizadas en la construcción de un solo automóvil (y muchas más en la construcción de vehículos pesados), la industria automovilística depende en gran medida de una entrega sin problemas y justo a tiempo. En comparación con la situación actual, el acuerdo alcanzado por los negociadores introduce mucha más burocracia y carga normativa para la industria.

Cada año, casi tres millones de vehículos de motor por valor de 54.000 millones de euros se comercializan entre la UE y el Reino Unido, y el comercio de piezas de automóviles a través del canal representa casi 14.000 millones de euros.