Glasurit organizó un curso sobre coches clásicos Mercedes-Benz

Glasurit celebró recientemente un seminario sobre reparación de coches clásicos Mercedes-Benz. El objetivo del curso es que la reparación sea «invisible» y para ello se abordaron problemas de corrosión, envejecimiento o desgaste/pérdida de brillo. La visita de los asistentes a las instalaciones de BASF permitió al fabricante de pinturas mostrar su laboratorio de ensayos acelerados, así como abordar la explicación técnica del proceso de corrosión para que los técnicos pudieran comprender la reacción química producida sobre la superficie.

seminario sobre reparación de coches clásicos Mercedes-Benz en instalaciones de Glasurit BASF

La jornada contó con la presencia telemática de los Asesores de Carrocería de la red Classic Partners de Mercedes-Benz, que pudieron conocer de primera mano nuevas particularidades de esta tipología de vehículos, cuyos trabajos se abordan con un planning y timing distintos de los vehículos convencionales que llegan a los concesionarios.

A la sesión también asistieron Oscar Ortín y Angel Chinarro, personal cualificado en clásicos de Mercedes-Benz España, a quienes Glasurit agradece «la confianza depositada en nosotros para la consecución y éxito de la formación, siendo determinante la coordinación entre ambos para la completa satisfacción del cliente final en el cuidado de su vehículo clásico».

Glasurit seminario sobre reparación de coches clásicos Mercedes-Benz

¿Qué son exactamente los coches clásicos?

Saber diferenciar entre un coche viejo, un coche clásico o un coche histórico es un matiz importante para el planteamiento de una reparación. Si bien el coche viejo es aquel que el propietario ha aguantado el paso de los años, el coche clásico es un vehículo que ha sido cuidado por su propietario como el primer día, manteniéndose fiel al producto original en cuanto a los materiales y componentes empleados para su mantenimiento y/o reparación. Una categoría superior son los coches históricos, que son aquellos de más de 30 años de antigüedad.

Numerosas son las particularidades de estos vehículos, por ejemplo, que son bienes muebles en alza que impactan poderosamente en el mercado y incrementan su valor día tras día. Si bien, hay que seguir una normativa estricta en el proceso de reparación para que siga teniendo ese valor.

En el apartado de pintura y trabajos de reparación y restauración interviene la carta de Turín, editada por la Federación Española de Vehículo Antiguo y aprobada por Federación Internacional de Vehículo Clásico, donde se dan las premisas y directrices relativas a las decisiones e intervenciones que hay que tomar para que el coche clásico no se devalúe.

¿Cómo se encuentra el vehículo? ¿Ha sido pulido o encerado? ¿Nunca antes lo habían hecho? ¿Lo han lavado a mano o lo han metido en los túneles de lavado? ¿Se ha guardado por décadas en el garaje o ha estado rodando y aparcado en el exterior? ¿Ha sufrido el deterioro del sol o por el contrario ha estado en una zona sin excesiva exposición a la radicación? ¿Ha sido ya reparado? ¿Y repintado? Todas estas preguntas hay que valorarlas y analizarlas para poder asesorar correctamente en una reparación de este tipo.