Fenadismer ha solicitado al Gobierno la intervención de los precios de los carburantes para evitar el colapso del transporte de mercancías por carretera. La petición de la federación del transporte llega tras meses de subidas, tanto de los carburantes como de la energía en general, en un contexto internacional actual que no hace sino agravar la incertidumbre y entre cuyas repercusiones se refleja la subida de los precios.
De marzo del año pasado a este mes de marzo, el precio del gasóleo ha subido un 36% y nuevas subidas de la energía se esperan de forma inminente. «La luz lo estamos viendo día a día y el gasóleo casi cada día. La situación de incertidumbre en la que llevamos meses, muy agravada por la invasión de Ucrania por Rusia, no ha hecho más que empeorar la situación para los más de 100.000 transportistas españoles que, si ya antes tenían problemas para repercutir la variación del precio del gasóleo, ahora aún más, ya que negociar día a día el precio del transporte es muy complicado», lamentan desde la entidad.
El Real Decreto aprobado la semana pasada, fruto de las negociaciones del Comité Nacional y el Gobierno en diciembre, recoge la obligatoriedad de que los precios del transporte recojan las subidas del gasóleo. Y es obligatorio, sin posibilidad de pacto en contra, desde el día siguiente a su publicación en el BOE, es decir, desde el pasado 2 de marzo.
Se estima que los vehículos de más de 12 Tn tendrían que subir a día de hoy un 12% sus precios de transporte por la escalada del precio de los carburantes en los últimos 12 meses. Pero, previsiblemente, en los próximos días se darán más subidas del precio del gasóleo. «Es prácticamente imposible que los transportistas puedan repercutir estas subidas en sus clientes, lo primero por la reticencia de los mismos y lo segundo por la rapidez con la que van subiendo los precios de la energía», estima Fenadismer.
Especialmente afectado ante estos incrementos es el sector del transporte de mercancías, que depende del combustible irremediablemente. Por eso, Fenadismer solicita al Gobierno que, con carácter urgente y excepcional, proceda a intervenir el mercado de los combustibles en España, limitando los precios máximos de venta, como el sistema que estuvo vigente en la década de los años 90, mientras se mantiene la actual situación de incertidumbre y volatilidad del mercado de la energía a nivel internacional.
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