El entorno actual del automóvil, cada vez más globalizado y sujeto a unos cambios tecnológicos que pasan por los conceptos de conectividad, autonomía, sostenibilidad y seguridad, demanda un sector digitalizado y capacitado para asumir los nuevos retos y oportunidades. En este contexto, Ancera ha elaborado un Plan de Medidas Ejecutivas concretado en un decálogo de propuestas electorales a los partidos políticos para definir el futuro inmediato de la distribución independiente de recambios.
Decálogo de propuestas electorales de Ancera
- Promover la neutralidad tecnológica: El sector de la venta y posventa del automóvil, que aporta más de un 13 % al PIB, vive en una situación de incertidumbre respecto a la energía de propulsión de los vehículos. Los nuevos vehículos de combustión contaminan hasta un 90% menos que los más antiguos. Todas las tecnologías tienen sus virtudes y sus defectos en cuanto a emisiones contaminantes, por lo que la Administración debe promover en todo momento el principio de neutralidad tecnológica.
- Incentivar la renovación del parque: Los coches que circulan por nuestras carreteras tienen una edad media superior a 12 años, por lo que los más antiguos pueden llegar a emitir hasta un 90% más de contaminación con respecto a los vehículos más nuevos, sean diésel o gasolina. Favorecer que el parque sea más joven disminuirá las emisiones contaminantes, a la vez que mejorará la seguridad en las carreteras.
- Mejorar la imagen del automóvil: Este sector se ha visto gravemente perjudicado por la falta de información de cierta opinión pública, especialmente en lo que respecta a las emisiones de polución en las grandes ciudades, ya que solo es responsable del 20% de las mismas. El sector no cesa de invertir en innovación y desarrollo de componentes para que los vehículos sean cada vez más limpios y eficientes, con el objetivo de encontrar una movilidad completamente sostenible que respete el medio ambiente. La Administración debe colaborar con la industria en la comunicación pública de las acciones emprendidas.
- Alentar el recambio de piezas y el mantenimiento preventivo: La renovación del parque exige al ciudadano medio una gran inversión, pero las emisiones de los vehículos privados se reducen hasta un 50% con operaciones de mantenimiento preventivo en talleres de reparación que sustituyan piezas, especialmente las más eficientes y respetuosas con el medio ambiente. Además, un vehículo en óptimas condiciones garantizará la seguridad en las carreteras. Las campañas de sensibilización para el correcto mantenimiento y renovación de las piezas ayudan a mejorar tanto la calidad del aire como la seguridad vial.
- Establecer un IVA reducido: Para poder alentar el recambio de piezas y el adecuado mantenimiento de vehículos, Ancera propone una reducción del IVA en las operaciones de reparación y mantenimiento, así como en el coste de los recambios utilizados, ya que van a mejorar la seguridad vial y la calidad del aire. Asimismo, y con el fin de disminuir las emisiones de los vehículos, los talleres de reparación podrían obtener ayudas y ventajas fiscales, como el IVA en bienes de equipo y maquinaria necesaria para su actividad y para medir las emisiones contaminantes de los coches.
- Facilitar la identificación de recambios: La correcta identificación de recambios es imprescindible en un sistema con millones de referencias. El consumidor es el principal perjudicado por los retrasos de los talleres por la incorrecta identificación de piezas. Por ello, el sector pidió a la DGT (que accedió a facilitarlo) el acceso al número de bastidor del vehículo a través de la matrícula para mejorar significativamente la identificación. El problema es el coste repercutido al sector, que provoca que este servicio sea ineficaz para la posventa y el desarrollo operativo de 3.500 tiendas de recambios y 40.000 talleres de reparación independientes, que facturan más de 25.000 millones de euros anuales y dan trabajo a más de 200.000 personas. Solucionar este problema implicaría una mejora en los servicios a los consumidores y alentaría a la revisión de sus vehículos, lo que mejora la seguridad en las carreteras y cuida el medio ambiente.
- Garantizar el acceso a información técnica, datos y recursos: La tecnología actual del automóvil hace imprescindible acceder a información de los constructores de coches para poder reparar y mantener los vehículos. Por esta razón, los operadores independientes (talleres, distribuidores, proveedores o editores de información, entre otros) necesitan acceder a la misma información y de la misma manera que los concesionarios y talleres autorizados por el fabricante del vehículo, para que los más de 40.000 talleres independientes puedan competir de forma justa, eficaz y con libre competencia.También es necesario garantizar un acceso justo, seguro, independiente, no supervisado, en tiempo real y neutral a los datos del vehículo, una comunicación bidireccional con el vehículo y sus funciones, así como la capacidad de interactuar remotamente de forma segura e independiente con el conductor y ejecutar software independiente con el vehículo, promoviendo la igualdad de condiciones y la seguridad.Si se accediese a estas garantías, los consumidores tendrían pleno control para decidir qué proveedores de servicios pueden acceder a sus datos, sin interferencias de los fabricantes de vehículos; se aseguraría la competencia efectiva y la no supervisión a las empresas independientes que compiten entre sí por parte de los fabricantes de vehículos; se permitirían soluciones innovadoras y nuevos modelos de negocio. Esto es totalmente compatible con la ciberseguridad; además, mejoraría la seguridad vial y contribuiría a una economía más sostenible y circular, garantizando el cumplimiento de las normas de protección de datos a través de una relación directa entre el proveedor de servicios y el cliente.
- Mantener la libre competencia en la posventa: Actualmente se debate en Bruselas el futuro del Bloque de Exención por Categorías del sector del automóvil. Esta norma permite al usuario reparar su vehículo dónde y con las piezas que elija sin perder la garantía; a los fabricantes de componentes vender al sector independiente; y a los talleres autorizados comprar al sector independiente y usar piezas originales o equivalentes. También obliga a acceder sin discriminación a la información técnica en un formato fácilmente accesible y utilizable; a suministrar piezas originales a talleres; y al doble marcaje en los repuestos. Es imprescindible mantener estas exenciones reglamentarias para poder competir libre y justamente y, por supuesto, adaptarlas a las necesidades del mercado actual. El apoyo del Gobierno español a una actualización del Reglamento permitirá a nuestras empresas beneficiarse de condiciones más justas para competir con los fabricantes de vehículos en los nuevos servicios resultantes de la creciente digitalización del vehículo y de los servicios de posventa del automóvil.
- Evitar que las piezas visibles sean cautivas: También se debate actualmente en Europa la norma que permite la venta de recambios visibles por el sector independiente. En caso de no existir, tanto la venta como las reparaciones de piezas visibles estarían cautivas en el sector marquista, pudiendo aumentar los precios, tal y como muestran diversos estudios, hasta en un 30%. De esta manera, ante el injustificado precio de las piezas visibles procedente desde este monopolio, negaría la capacidad de decisión del consumidor en cuanto a la renovación de su automóvil. La innovación y la seguridad del vehículo no se verá mermada nunca con la cláusula de reparación de la directiva de diseño, que ha funcionado muy bien hasta ahora en el mercado español: por un lado, la innovación en el sector ha ido aumentando año a año al producirse una competencia libre y efectiva; por otro, las piezas visibles y estéticas no tienen repercusión en la seguridad, y las que sí la tienen están sujetas a las estrictas normas de homologación de tipo que han de pasar todos los vehículos y piezas introducidas en la Unión Europea.
- Garantizar al consumidor la libertad de elección de taller: Más del 90% de las reparaciones de carrocería y pintura de los vehículos proceden del sector asegurador, por lo que establecer una competencia libre y justa en toda la cadena de posventa del automóvil es necesaria para garantizar la libertad de elección del consumidor con respecto al taller de reparación y las piezas utilizadas. Por lo tanto, prever disposiciones normativas que garanticen esa libertad de elección facilitaría alcanzar las más altas cotas de innovación y de desarrollo competitivo del sector, incluyendo precios más bajos de las reparaciones.
También te puede interesar:
- Ancera pide en Europa la actualización del Reglamento 461/2010
- El XXXII Congreso de Ancera tuvo un fuerte acento internacional
- CONEPA traslada al nuevo Parlamento Europeo las inquietudes de los talleres
There are no comments
Add yoursLo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Related Articles