¿Qué supondría un Brexit sin acuerdo para el transporte español?

Ante el escenario de una posible salida del Reino Unido de la UE sin acuerdo el próximo 31 de octubre, Fenadismer ha manifestado públicamente su preocupación sobre las nefastas consecuencias que eso tendría para el intercambio comercial por carretera entre España y dicho país. Y es que su salida del mercado europeo como consecuencia del Brexit dificultaría gravemente el libre movimiento de personas y mercancías, limitando mucho el volumen de camiones que podrían realizar transporte entre ambos países.

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Cabe recordar que el Reino Unido forma parte de la Unión Aduanera, la cual establece la eliminación de las fronteras entre los países miembros con relación al transporte de todas las mercancías. Por ello, una vez que el Reino Unido abandonase precipitadamente la UE, se establecerían nuevos criterios aduaneros y arancelarios tanto en la exportación como importación de mercancías, así como el restablecimiento de las fronteras de acceso entre ambos territorios.

Y es que el Reino Unido representa el quinto país de destino de los transportistas españoles, con el 8,1% del total de las toneladas-kilómetros realizados por los vehículos pesados españoles, en concreto unos 8.000 camiones. Todos ellos se verán afectados por nuevos trámites aduaneros al paso por la frontera británica, lo que afectaría principalmente a las exportaciones españolas de productos agroalimentarios, automoción, productos farmacéuticos y mercancía general.

En lo que se refiere a la regulación de la actividad del transporte por carretera, la salida no negociada de la UE traería como consecuencia la derogación automática de la actual autorización de transporte europea (licencia comunitaria) que permite realizar ilimitadamente transportes entre España y Gran Bretaña, por lo que los derechos de acceso al mercado entre la UE y el Reino Unido por parte de las empresas transportistas se limitarían a los permisos ofrecidos en el marco de la Conferencia Europea de Ministros de Transportes – Cemt. En este sentido, cabe recordar que España tiene concedido un cupo muy limitado de este tipo de autorizaciones bilaterales: menos de 800 autorizaciones anuales, lo que representa menos del 10% de los vehículos que en la actualidad operan entre ambos países.

Dichas autorizaciones Cemt serían las únicas que permitirían el tránsito entre ambos países, teniendo en cuenta que dichas autorizaciones son solicitadas por las empresas transportistas para realizar servicios a otros países europeos no comunitarios. Así, en caso de tener que utilizarse para el desplazamiento al Reino Unido, obligaría a reducir el intercambio comercial con otros países no miembros de la UE.