Los nuevos límites de velocidad urbanos, fuente de nuevas averías

Aunque con el objetivo reducir la siniestralidad al volante, las nuevas velocidades máximas en ciudad tendrán nuevas consecuencias.


A partir del 11 de mayo entran en vigor los nuevos límites de velocidad en las ciudades españolas. La red de talleres Euromaster recuerda que esta nueva manera de circular por los entornos urbanos implicará el uso de marchas más cortas que permitan adecuarse a velocidades más reducidas y, en consecuencia, el incremento del riesgo de sufrir averías vinculadas a un exceso de uso del vehículo bajo esas condiciones.

Los nuevos límites de velocidad urbanos, fuente de nuevas averías

De este modo, y desde esta misma semana, los conductores solo pueden circular a 20 km/h en vías que tengan única calzada y a 30 km/h en las de un único carril por sentido de circulación. El límite de velocidad para las vías con dos o más carriles por sentido se mantiene en los actuales 50 km/h.

A efectos prácticos, los nuevos límites de velocidad se traducirán en un mayor desgaste de los embragues, operación que, en caso de avería, supone para el bolsillo un gasto de hasta 2.000€ según la marca y modelo de repuesto.

Además, la conducción a menor velocidad provocará que se revolucione menos el coche, evitando la limpieza completa del motor. Esto provocará que el filtro de partículas, ubicado en el tubo de escape, también sufra y se obstruya, no eliminando el hollín que genera el motor. Para evitar una avería de unos 600€ como mínimo, se puede pedir al taller la realización de labores de mantenimiento tales como la descarbonización del motor. También es recomendable salir a la carretera y «airear» el coche circulando con marchas más largas.

Los nuevos y más bajos límites de velocidad en espacios urbanos aprobados por la DGT tienen por objetivo reducir la siniestralidad en nuestro país. No obstante, esta medida, que reducirá a la mitad el ruido ambiental, tendrá un efecto medioambiental negativo, ya que las marchas más bajas contaminan bastante más que las largas a bajas revoluciones. Por ejemplo, en el caso de un coche de cilindrada pequeña, su consumo sería alrededor de un 10% menor si circulara en cuarta marcha en vez de en tercera, que será la que deba engranar para poder respetar los nuevos límites de velocidad.

 

euromaster

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