El sector de la automoción en su conjunto, representado por las asociaciones de fabricantes de automóviles (Anfac) y de componentes (Sernauto), y las de concesionarios, distribución y comercialización de vehículos (Faconauto y Ganvam), han reclamado en la que supone la primera rueda de prensa conjunta de sus presidentes la unificación del diálogo del Gobierno con el sector de la automoción a través de la ya existente Mesa de Automoción. Esta petición se realiza para evitar ineficiencias entre administraciones y recuperar el diálogo y la unidad de acción que permitieron lanzar hace escasos meses el Plan de Impulso a la Cadena de Valor del Sector de la Automoción.
Estas asociaciones, las más representativas del sector del automóvil en nuestro país, alzan de nuevo la voz de manera conjunta para evidenciar su preocupación y alertar de la «situación insostenible» que atraviesa el sector, clave para la economía española. «Las medidas puestas en marcha por el Gobierno no están logrando la recuperación y, en ocasiones, resultan contradictorias», lamentaron en su comparecencia pública.
Todas ellas consideran que, si las cosas siguen como hasta ahora, el sector se expone a una crisis prolongada en un momento en el que urge tener planes de desarrollo e innovación para atraer inversiones de futuro y sacar el máximo partido posible a los fondos de recuperación europeos, cuando todos los países europeos luchan por consolidar sus sectores nacionales. Las asociaciones aseguraron que es «urgente» poner en marcha las medidas adecuadas para reactivar el mercado y la producción para no perder la «oportunidad histórica» que suponen estos fondos para activar, además, la transformación de la industria y la distribución.
Alertan de que se han puesto en marcha medidas que no responden al plan de Impulso a la Cadena de Valor del Sector de la Automoción aprobado por el propio Gobierno en junio, y que no están teniendo respuesta al respecto, lamentando además políticas como la subida del impuesto de matriculación que tendrá un impacto negativo en la recuperación del sector y envejecerá aún más el parque. Lo mismo ocurre con los planes Renove y Moves II, que no están cumpliendo sus objetivos por contar con poca dotación, ser complejos en su aplicación o tener un reparto no acorde con el mercado.
La prioridad a corto plazo sigue siendo impulsar la demanda, porque sin demanda no hay recuperación del sector. Las asociaciones remarcaron que el sector no puede permitirse un año 2021 en las mismas cifras con las que acabará este año. La no reactivación de la demanda traerá otras consecuencias: continuará el envejecimiento del parque de nuestro país (casi 13 años de media) y se retrasará la descarbonización de la movilidad.
Señalaron además que, si se quiere un país con futuro, desde las Administraciones Públicas se debe favorecer la inversión en I+D+i y en proyectos industriales ligados a la movilidad segura, sostenible y conectada y a la digitalización e impulsar la desgravación fiscal de la innovación en proceso, también para las empresas de mayor tamaño. Urge, en este contexto, activar medidas que garanticen no solo la supervivencia del sector post COVID-19 sino la visión de futuro y posicionamiento global de la industria.
Por todo ello, las cuatro asociaciones comparecientes reclamaron que la Mesa de la Automoción, liderada por el ministerio de Industria, cumpla su papel de foro en el que participen las administraciones y el sector, que se pongan en marcha los necesarios y anunciados grupos de trabajo y que sea efectiva y eficaz desde ya mismo para activar el modelo de futuro que necesita el sector.
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