Los resultados obtenidos en el cierre del Barómetro de Electromovilidad 2022 de Anfac vuelven a poner en relevancia el lento desarrollo del vehículo eléctrico en una España que sigue a la cola de la electrificación en Europa. Durante el último año, su indicador global de electromovilidad (que valora la presencia de vehículos electrificados y la instalación de infraestructuras de recarga públicas) ha alcanzado una valoración de 15,3 puntos sobre 100, lo que supone un crecimiento de sólo 3,5 puntos respecto al 2021. El retraso se evidencia al compararse con Europa, donde la media de los países se sitúa en un total de 33,7/100, con un aumento de 7 puntos.
Tal y como destacó Anfac en la presentación de su Hoja de Ruta 2023-25 el pasado mes de enero, el ritmo de desarrollo de la electrificación en Europa se está partiendo en dos y España circula en el «vagón de cola». En el grupo de cabeza se encuentran países como Alemania, Países Bajos o Reino Unido, que crecen por encima de la media europea, destacando también el caso de Portugal que gracias a una fiscalidad ventajosa y otras medidas favorables se sitúa al mismo ritmo que la media en Europa. Mientras, España con cerca de 15 puntos por debajo de la media europea se ubica al mismo nivel de desarrollo que países como Hungría, República Checa o Italia.
En cuanto al indicador nacional, todos los territorios ofrecen un ligero aumento, a pesar del lento desarrollo de la infraestructura de recarga y la entrada de vehículos electrificados. El ranking lo encabeza Madrid con un total de 21,5/100, seguido de Navarra con 18,7/100 y Cataluña con 18,5/100.
Crecen los eléctricos, pero no al ritmo necesario
En el 2022, el indicador de penetración del vehículo electrificado logró una valoración media de 23,2 puntos, que representa un crecimiento de 3,6 puntos para situar a España en el antepenúltimo puesto europeo. La media europea incrementó 7,4 puntos (el doble que España), situándose en un total de 51,2/100. El indicador refleja el ritmo tan desigual que países como Alemania, Noruega o Países Bajos están obteniendo, con crecimientos por encima de los 10 puntos y encabezando el ranking europeo.
Durante el año pasado, España con un aumento del 17,1% y 78.316 turismos electrificados, incrementó el ritmo de entrada en el mercado. Pero a pesar de este crecimiento, no se logró alcanzar el hito mínimo de 120.000 nuevas matriculaciones necesarias en 2022 para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones previstos para 2030.
Respecto al contexto nacional, Madrid se mantiene liderando el ranking con un total de 37,6/100 y muy por encima de la media nacional. En cuanto al resto del ranking, Navarra y Cataluña se sitúan en los puestos de cabeza. Cabe destacar los notables avances que han logrado regiones como Aragón o Castilla-La Mancha.
España, penúltima en el desarrollo de infraestructuras de recarga públicas
España sigue sin lograr acelerar el ritmo de desarrollo de infraestructuras de recarga en 2022, ocupando así las últimas posiciones en el ranking europeo. En 2022 se alcanzó una valoración de 7,3/100 en este indicador, lo que representó un aumento de 3,3 puntos respecto a 2021. A pesar de este incremento, España se sitúa muy lejos del ritmo de desarrollo de una media europea que logró crecer en 6,7 puntos hasta alcanzar una valoración total de 16,2 puntos. Por su parte, hay que destacar el notable crecimiento registrado en Portugal que, con un incremento de 13,7 puntos, escala desde los últimos puestos hasta situarse por encima de la media europea.
En el ámbito nacional, la mejora de 3,3 puntos en el barómetro de Anfac viene explicada en mayor medida por el despliegue de puntos de recarga rápida. En el ranking nacional, las posiciones de cabeza varían respecto al año anterior, siendo Castilla y León, Navarra y Cataluña quienes lo lideraron en 2022.
Durante 2022, las infraestructuras de recarga de acceso público alcanzaron los 18.128 puntos de recarga, lo que en comparación con el año anterior supuso 4.717 nuevos puntos. El aumento registrado en el último año fue insuficiente para alcanzar el objetivo marcado para 2022 de 45.000 puntos de recarga, necesarios para dar cobertura al objetivo del PNIEC. Igualmente, al ritmo actual será difícil alcanzar los objetivos indicados en el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia marcados por el Gobierno que fijan para 2023 entre 80.000 y 100.000 puntos de recarga de acceso público y 250.000 vehículos electrificados.
Por otra parte, del total de nuevos puntos de recarga instalados durante 2022, el 55% corresponden todavía a potencias de 22kW o menos, es decir 2.582 puntos de recarga. En su totalidad, a cierre de 2022 para consolidar una red de infraestructura de recarga de calidad es necesaria la instalación de puntos de recarga rápidos por encima de los 22kW que permitan reducir los tiempos de carga. A cierre de 2022, solamente el 21% de la infraestructura de recarga de acceso público cumplía con esta condición.
Pero yendo más allá, solamente el 1,4% de la infraestructura de recarga de acceso público permite la carga a 250kW o más, lo que permite tiempos de recarga de menos de 15 minutos. Para tener una infraestructura de recarga con suficiente calidad es necesario contar con instalaciones con potencias superiores a 150kW que sean capaces de abastecer y facilitar el despliegue del vehículo electrificado. De igual modo, este tipo de infraestructuras serán necesarias para la movilidad eléctrica asociada a los vehículos pesados que parten de potencias de carga de 150kW ya en la actualidad y requerirán potencias muy superiores en el medio y largo plazo.
También te puede interesar:
- Anfac: «España necesita un modelo propio de movilidad y acelerar la electrificación»
- Anfac presenta su Hoja de Ruta 2023-25: «España no puede perder 2023»
- Anfac publica su primer Informe sobre Vehículo Autónomo y Conectado
No hay comentarios
Escribir comentarioLo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Artículos relacionados