Los efectos que ejercen sobre la dirección del vehículo unos componentes de dirección y suspensión defectuosos son enormes. Y es que, particularmente con los diseños de chasis actuales, la funcionalidad en la interacción de todos los componentes relevantes es algo crucial. Por ello, ZF Aftermarket ha compartido una serie de indicaciones generales en la sustitución de componentes de caucho-metal. Así, además de los componentes del engranaje de la suspensión, el mecánico también deberá comprobar y sustituir regularmente este tipo de piezas, tan pequeñas como indispensables para el buen funcionamiento del conjunto de la dirección.
La misión de las piezas de caucho-metal es absorber las vibraciones y el ruido no deseados en el sistema del chasis, actuando como conexión elástica entre los componentes individuales que lo integran. Además, estas piezas influyen en la generación de ruido y en la transmisión, en el comportamiento de la dirección y en la estabilidad de la conducción. Dependiendo de la marca y el modelo, se pueden instalar hasta doce componentes de caucho-metal diferentes dentro del sistema del chasis.
El apoyo de múltiples cojinetes tradicionales (de soporte de la suspensión, del eje, del brazo de suspensión o de la barra estabilizadora, entre otros) mejoran el comportamiento de la dirección y la estabilidad de la conducción. Otras partes cruciales, además de estos cojinetes de caucho, son los cojinetes con amortiguación hidráulica, concretamente en la caja del eje, el cuerpo del eje y los cojinetes del brazo de suspensión. Debido a las propiedades de amortiguación del fluido, además del núcleo de goma, los llamados «soportes hidráulicos» logran una reducción óptima de las vibraciones en rangos de frecuencia más altos.
Montaje y desmontaje
Su instalación requiere herramientas adecuadas y, a veces, especiales. Antes de desmontar, es esencial prestar atención a la posición del rodamiento para identificar la posición relevante para la instalación. Por lo general, los expertos de ZF Aftermarket recomiendan marcar la posición de instalación con anticipación. En algunos casos, las marcas de posicionamiento en las propias piezas y/o en la posición de montaje, permiten un ajuste preciso del nuevo rodamiento.
El aceite como ayuda para el montaje no debe utilizarse para las piezas de caucho-metal, ya que corroe y daña la goma. Una solución jabonosa es una opción más adecuada en este caso. Los pernos de fijación de los rodamientos del eje y del soporte de la suspensión, sólo deben apretarse al par requerido cuando el vehículo vuelva a su posición original. Esto evita la distorsión dentro del cojinete, lo que llevaría a un desgaste prematuro de las piezas nuevas.
ZF también aconseja a los mecánicos que comprueben si los guardapolvos de goma de las rótulas están desgastados, dañados o tienen fugas. Si las partículas de suciedad han entrado en la articulación, podrían disolver completamente la carcasa de la bola de plástico interior, dañar la bola y la carcasa de la articulación. Esto significa que la holgura de la articulación ya no cumpliría los requisitos. Lo mismo ocurre si se hace visible la corrosión por picaduras en los anillos de sujeción de los muelles de los fuelles. Durante la dirección, la rótula de dirección requiere una atención especial. Además de los capuchones, los fuelles de dirección deben ser revisados para ver si están dañados. Aquí, ZF recomienda útiles de presión para desmontar las juntas.
El proveedor alemán recuerda por último que, bajo su marca Lemförder, ofrece una amplia gama de componentes de dirección y chasis de calidad de Equipo Original, los cuales ofrecen una larga vida útil y un máximo confort de conducción.
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